El correo electrónico es un medio de transporte usado frecuentemente por programas maliciosos. Por lo tanto, hay que extremar las precauciones.

Antes de abrir un correo electrónico sospechoso hay que considerar los siguientes aspectos:

1-. Verifique el remitente del correo, confirmando que el nombre del remitente es coherente con la dirección de correo y sus datos. Para esto:

En caso de Outlook: posicione el cursor sobre la dirección del correo emisor, presione botón derecho del mouse, seleccione opción “Abrir tarjeta de contactos” y verifique datos del remitente.
En caso de OWA (Webmail) : posicione el cursor sobre la dirección del correo emisor y verifique datos del remitente.

 

2. Verifique que el contenido del correo recepcionado sea coherente,  sospeche si esto no es así.  

3. Nunca abra archivos adjuntos, ni pinche un enlace de contenido en un correo de procedencia sospechosa.

Los ciberdelincuentes le harán creer que ha recibido un correo electrónico de una entidad conocida pudiendo infectarlo con un programa malicioso (virus, malware, etc).

En caso de duda sugerimos consultar directamente al remitente del correo para comprobar su veracidad.

4. Ante la duda de la originalidad de un correo, desconfíe y no lo abra, en caso de ser un correo malicioso muévalo a la carpeta de spam de su cuenta de correo.

5. Verifique que el antivirus institucional (GData) esté instalado y activo en los computadores institucionales que usted utiliza.

Si necesita ayuda en cualquier tema de seguridad de correos electrónicos, no dude en consultar a su soporte técnico de su Facultad / Sede / Dirección o a la Dirección de Servicios Informáticos (800 800 602 / ayuda@ucsc.cl).